Diez años desde la Budapest Open Access Initiative: hacia lo abierto por defecto
Prólogo: La Iniciativa Acceso Abierto de Budapest, 10 años después
Hace diez años, la Iniciativa Acceso Abierto de Budapest (Budapest Open Access Initiative, BOAI) lanzó una campaña mundial para el acceso abierto (open access, OA) para las publicaciones científicas. Esta iniciativa no inventó la idea del acceso abierto. Por el contrario, deliberadamente reunió a los proyectos existentes para explorar cómo podían “trabajar juntos para alcanzar el éxito de forma más amplia, más profunda y más rápida”. Sin embargo, la BOAI fue la primera iniciativa en utilizar el concepto de “acceso abierto” con este objetivo, la primera en articular una definición pública del acceso abierto, la primera en proponer estrategias complementarias para hacer realidad el acceso abierto, la primera en generalizar los llamamientos a favor del acceso abierto a todas las disciplinas y países, y la primera en ir acompañada de un financiamiento significativo.
En la actualidad ya no nos encontramos en el inicio de esta campaña mundial, pero tampoco hemos alcanzado el final. Estamos firmemente en el medio, respaldados por una década de experiencia que nos permite formular nuevas recomendaciones para los próximos diez años.
Reafirmamos la “declaración de principios, … la declaración de estrategias, y … la declaración de compromiso” de la BOAI. Reafirmamos la meta de lograr este “bien público sin precedentes” y “acelerar la investigación, enriquecer la educación, compartir lo aprendido por los ricos con los pobres y lo aprendido por los pobres con los ricos, hacer que la literatura científica sea tan útil como pueda ser, y sentar las bases para unir a la humanidad en una conversación intelectual y búsqueda del conocimiento compartidas”.
Reafirmamos nuestra confianza en que “el objetivo es alcanzable y no meramente preferible o utópico”. Nada de los últimos diez años ha hecho que la meta sea menos alcanzable. Por el contrario, el OA está bien establecido, y crece en todas las disciplinas. Tenemos más de una década de valiosa sabiduría práctica sobre cómo implementar el acceso abierto. La viabilidad técnica, económica y legal del acceso abierto está suficientemente demostrada y bien documentada.
Nada de los últimos diez años hace pensar que el acceso abierto sea menos necesario u oportuno. Por el contrario, “los científicos y académicos … (todavía) publican los resultados de sus investigaciones en revistas científicas sin cobrar por ello” y “sin expectativas de pago.” Además, los investigadores suelen participar en la revisión por pares como revisores y editores, sin expectativas de pago. Sin embargo, en la mayoría de los casos las barreras al acceso a las publicaciones científicas permanecen firmes, en beneficio de los intermediarios en lugar de beneficiar a los autores, evaluadores o editores, y en detrimento de la investigación, de los investigadores y las instituciones de investigación.
Por último, nada de los últimos diez años indica que el objetivo sea menos valioso o merecedor de ser alcanzado. Por el contrario, la necesidad imperiosa de hacer accesibles los conocimientos a todos los que puedan utilizarlos, aplicarlos o aumentarlos es más apremiante que nunca.
Reafirmamos las dos principales estrategias propuestas por la BOAI: el acceso abierto a través de repositorios (también llamado ” acceso abierto verde”) y a través de las revistas (también llamado ” acceso abierto dorado”). Diez años de experiencia nos llevan a reafirmar que la ruta verde y la ruta dorada “no son sólo medios directos y eficaces a tal efecto, sino que están al alcance de los académicos, de forma inmediata, y no necesitan esperar los cambios producidos por los mercados o por la legislación.”
Diez años de experiencia nos llevan a reafirmar la definición de acceso abierto presentada originalmente por la BOAI:
Por “acceso abierto” [a la literatura científica revisada por pares], nos referimos a su disponibilidad gratuita en la Internet pública, que permite a cualquier usuario leer, descargar, copiar, distribuir, imprimir, buscar o añadir un enlace al texto completo de esos artículos, rastrearlos para su indización, incorporarlos como datos en un software, o utilizarlos para cualquier otro propósito que sea legal, sin barreras financieras, legales o técnicas, aparte de las que son inseparables del acceso mismo a la Internet. La única limitación en cuanto a reproducción y distribución, y el único papel del copyright (los derechos patrimoniales) en este ámbito, debería ser la de dar a los autores el control sobre la integridad de sus trabajos y el derecho a ser adecuadamente reconocidos y citados.
Los problemas que antes demoraron la adopción y aplicación del acceso abierto están resueltos, y las soluciones se están extendiendo. Pero hasta que el acceso abierto se extienda aún más, los problemas para los cuales el acceso abierto es una solución permanecerán en gran medida sin resolver. En esta declaración, reafirmamos los fines y los medios de la declaración original de la BOAI, y renovamos nuestro compromiso de avanzar. Además, establecemos de manera específica un nuevo reto para que, en los próximos diez años, el acceso abierto se convierta en el método por defecto para la distribución de la producción científica revisada por pares en todas las disciplinas y países.
Recomendaciones para los próximos 10 años
1. Sobre políticas
1.1. Cada institución de educación superior debería tener una política que asegure que las versiones revisadas por pares, de todos los futuros artículos científicos de los miembros de la institución, sean depositadas en el repositorio designado por la institución. (Ver recomendación 3.1 sobre los repositorios institucionales.)
- Los depósitos deberían hacerse lo antes posible, idealmente en el momento de la aceptación, y antes de o en la fecha de publicación formal.
- Las políticas universitarias deberían respetar la libertad de sus académicos para el envío de sus trabajos a las revistas de su elección.
- Las políticas universitarias deberían alentar, pero no exigir, la publicación en revistas de acceso abierto, y deberían ayudar a los miembros de su comunidad a entender la diferencia entre el depósito en un repositorio de acceso abierto y la publicación en una revista de acceso abierto.
- Cuando sea posible, las políticas universitarias deberían adoptarse de acuerdo con la voluntad expresa (mediante votación u otro mecanismo de consulta) de su personal docente e investigador, y dichas políticas deberían exigir el acceso abierto inmediato y acoger de buen grado el depósito en un repositorio incluso cuando no es una obligación (por ejemplo, de los conjuntos de datos, presentaciones en congresos, libros o capítulos de libros, trabajos publicados previo a la adopción de la política, etc.).
- Cuando las editoriales no permitan el acceso abierto en los términos adoptados por la universidad, recomendamos una de los dos opciones siguientes. La política puede requerir el depósito “oculto” o el depósito en un repositorio institucional que no sea de acceso abierto hasta que se obtenga el permiso para serlo. O bien la política puede otorgar a la institución un derecho no exclusivo para que los trabajos científicos de su personal estén disponibles en acceso abierto en el repositorio institucional (con o sin la opción de que sus miembros puedan renunciar a este derecho para determinadas publicaciones).
1.2. Todas las instituciones de educación superior que ofrecen títulos superiores deberían tener una política que asegure que las futuras tesis y disertaciones, una vez aprobados, sean depositados en el repositorio de acceso abierto de la institución. A petición de los estudiantes que deseen publicar su trabajo o solicitar una patente para un descubrimiento patentable, las políticas deben conceder plazos razonables de demora (embargo) para el depósito en el repositorio en lugar de exenciones permanentes.
1.3. Cada organismo público o privado que financie proyectos de investigación debería tener una política que asegure que las versiones revisadas por pares de todos los futuros artículos científicos derivados de la investigación financiada sean depositadas en un repositorio adecuado y puestos en acceso abierto tan pronto como sea posible.
- Los depósitos deberían hacerse lo antes posible, idealmente en el momento de la aceptación, y antes de o en la fecha de publicación formal.
- Cuando las editoriales no permiten el acceso abierto en los términos establecidos por la entidad financiadora, la política de la entidad financiadora debería instar (por norma) a los beneficiarios a que busquen otra editorial.
- Si las políticas de las entidades financiadoras permiten periodos de embargo antes de que los trabajos estén disponibles en acceso abierto, los embargos no deberían exceder los seis meses. Las políticas deberían permitir que no se apliquen periodos de embargo para las obras que no están sujetos a derechos patrimoniales (uncopyrightable works).
- Las entidades financiadoras deberían considerar a los costes de publicación como costes de investigación, y deberían ayudar a los beneficiarios a pagar costes de publicación razonables en revistas de acceso abierto de pago por publicar.
- Cuando sea posible, las políticas de las entidades financiadoras deberían exigir el acceso abierto libre (libre OA), preferiblemente a través de una licencia CC-BY o su equivalente.
- Un repositorio es adecuado para este propósito cuando proporciona el acceso abierto, es interoperable con otros repositorios, y toma medidas para la preservación a largo plazo. La opción escogida por la entidad financiadora debería ser determinada por la investigación en curso para dirimir cuestiones como la mejor opción para promover el depósito de los artículos incluidos, la utilidad de los depósitos, la conveniencia para las entidades financiadores y los autores, y los incentivos para un mayor crecimiento del acceso abierto.
1.4. Todas las políticas de acceso abierto de las entidades financiadoras y universidades deberían requerir el depósito en un repositorio de OA adecuado entre la fecha de aceptación y la fecha de publicación. Los metadatos deberían registrarse tan pronto como estén disponibles y deberían ser de acceso abierto desde el momento del depósito. El texto completo debería ofrecerse en acceso abierto tan pronto como el repositorio tenga permiso para hacerlo.
1.5. Desaconsejamos el uso de los factores de impacto de las revistas como sustitutos de la calidad de las revistas, de los artículos o de los autores. Alentamos a que se elaboren indicadores alternativos para el impacto y la calidad, y a que sean menos simplistas, más fiables y totalmente abiertos para su uso y reutilización.
- En la medida que las universidades, las entidades financiadoras y los programas de evaluación de la actividad investigadora necesitan medir el impacto de artículos individuales, deberían utilizar indicadores a nivel de artículo, y no indicadores a nivel de revistas.
- Alentamos la investigación sobre la exactitud de los nuevos indicadores. A medida que la investigación vaya demostrando su utilidad y fiabilidad, alentamos su uso por parte de las universidades (en los concursos de promoción de los docentes e investigadores), de las entidades financiadoras (en la evaluación de las solicitudes de financiación), de los programas de evaluación de la investigación (cuando evalúan el impacto de la investigación) y de las editoriales (cuando promocionan sus publicaciones).
- Alentamos la elaboración de trabajos para explicar cómo los factores de impacto de las revistas han sido mal utilizados, y cómo otros indicadores alternativos pueden cumplir mejor con los objetivos para los cuales la mayoría de las instituciones han utilizado anteriormente los factores de impacto.
- A medida que mejoren los indicadores de impacto, alentamos la realización de estudios para conocer si el acceso abierto y las políticas de acceso abierto aumentan el impacto de las investigaciones.
1.6. Las universidades que tienen repositorios institucionales deberían requerir el depósito en el repositorio de todos los artículos de investigación que deban ser tenidos en cuenta para decidir la promoción, permanencia en el puesto, u otras formas de evaluación y revisión interna.
- Asimismo, los gobiernos que realizan la evaluación de la investigación deberían exigir el depósito en repositorios acceso abierto de todos los artículos de investigación que se someterán revisión en los procesos nacionales de evaluación.
- Ninguna de las dos políticas debería ser interpretada como limitación a la evaluación basada en otro tipo de evidencia, o como alteración de los criterios de evaluación.
1.7. Las editoriales que no facilitan el acceso abierto a sus publicaciones deberían por lo menos permitir el acceso abierto en los términos especificados en sus acuerdos formales de publicación.
- Las editoriales deberían abstenerse de ejercer presión contra los gobiernos que actúan en defensa del interés público, y abstenerse de ejercer presión sobre las instituciones de investigación que actúan de acuerdo con el interés de los investigadores y de la investigación. Las editoriales deberían renunciar a las campañas de presión llevadas a cabo en su nombre por profesionales o por asociaciones comerciales, en contra del interés público y del interés de los investigadores y de la investigación.
- La minoría de editoriales con acceso por suscripción a sus revistas que todavía no permiten a los autores el autoarchivo en repositorios (acceso abierto verde), sin pagos ni embargos, deberían adoptar la posición de la mayoría.
- Recordamos a los investigadores que no deberían trabajar como autores, editores o revisores para las editoriales que actúen en contra de sus intereses.
2. Sobre licencias y reutilización
2.1. Recomendamos el uso de la licencia CC-BY u otra equivalente como licencia óptima para la publicación, distribución, uso y reutilización de los trabajos científico-académicos.
- Los repositorios de acceso abierto generalmente dependen de los permisos de otros, tales como los autores o editoriales, y rara vez están en condiciones de requerir el uso de licencias abiertas. Sin embargo, los responsables de la puesta en marcha de las políticas sí pueden requerir que el depósito de objetos digitales en repositorios se haga con este tipo de licencias, preferiblemente CC-BY, siempre que se pueda.
- Las revistas de acceso abierto siempre están en condición de requerir licencias abiertas, pero la mayoría de ellas todavía no instrumentalizan esta posibilidad. Recomendamos CC-BY para todas las revistas de acceso abierto.
- En el desarrollo de estrategias y establecimiento de prioridades, reconocemos que el acceso abierto gratuito es mejor que el acceso abierto restringido por suscripción, que el acceso abierto libre es mejor que el acceso abierto gratuito, y que el acceso abierto libre bajo licencias CC-BY u otra equivalente es mejor que el acceso abierto libre bajo licencias abiertas más restrictivas. Debemos lograr lo que podamos cuando podamos. No debemos retrasar el acceso abierto gratuito con el fin de lograr el acceso abierto libre, y no debemos conformarnos con el acceso abierto gratuito cuando podemos conseguir el acceso abierto libre.
3. Sobre infraestructura y sostenibilidad
3.1. Todas las instituciones de educación superior deberían disponer de un repositorio de acceso abierto o participar en uno consorciado, o gestionar la externalización de los servicios del repositorio de acceso abierto.
3.2. Todo miembro de la comunidad académica de cualquier disciplina y país, incluyendo aquellos que no están afiliados con instituciones de educación superior, debería tener el derecho al depósito de sus publicaciones en un repositorio de acceso abierto.
- Esto requerirá más repositorios institucionales o más repositorios temáticos, o ambas cosas. También podría requerirse, al menos a corto plazo, más repositorios universales o repositorios de último recurso para aquellos investigadores que no disponen de un repositorio de acceso abierto en su institución o en su disciplina. El texto de la interfaz del usuario de estos repositorios universales debería estar disponible en distintos idiomas.
3.3. Los repositorios de acceso abierto deberían disponer de los medios para recolectar de, y depositar en, otros repositorios de acceso abierto.
- Los investigadores que tengan razones para depositar en más de un repositorio deberían hacerlo sólo una vez. Siempre que sea posible, los repositorios institucionales deberían ofrecer la posibilidad de reenviar el depósito a repositorios temáticos solicitados por los autores (por ejemplo, arXiv, PubMed Central, SSRN) y deben poder recolectar o descargar copias de las publicaciones depositadas en repositorios temáticos.
3.4. Los repositorios de acceso abierto deberían poner a disposición de los autores los datos de descarga, uso y citación, y facilitar su disponibilidad a las herramientas informáticas que calculan las métricas alternativas del impacto. Los editores de revistas deberían hacer lo mismo, tanto si sus revistas son o no de acceso abierto.
- Los repositorios deberían compartir estos datos entre si en formatos estándar, de forma que sea posible (por ejemplo) que los autores conozcan el número de descargas totales de un artículo depositado en múltiples repositorios. Ningún autor ni repositorio debería tener motivos para bloquear el depósito en un repositorio adicional simplemente para preservar la medida exacta del tráfico de uso y descargas.
3.5. Las universidades y los organismos de financiación deberían ayudar a los autores a pagar cuotas razonables para la publicación en revistas de acceso abierto de pago por publicar, y encontrar formas similares para apoyar o subsidiar las revistas de acceso abierto que no cobren por publicar.
- En ambos casos, se debería exigir el acceso abierto libre a sus contenidos a través de licencias abiertas, preferiblemente CC-BY o el equivalente, como condición para su apoyo económico.
- Estas medidas de apoyo a las revistas científicas de acceso abierto debería ser prioridad máxima para la inversión del dinero ahorrado de la cancelación o la conversión de las revistas por suscripción.
- El apoyo a las revistas especializadas de acceso abierto puede ser especialmente importante para las revistas con una audiencia más limitada, tales como las centradas en la legislación nacional de los países pequeños, o las revistas publicadas en un idioma local, y para las revistas donde las tasas de publicación son improcedentes, tales como las revistas de revisión bibliográfica que solicitan los artículos a los autores.
3.6. Cuando las revistas de acceso por suscripción o las que no sean de acceso abierto permiten algún tipo de auto-archivo o depósito en repositorios de acceso abierto, deberían describir lo que permiten y no permiten, en términos precisos y legibles por el ser humano y por máquinas, en un formato estándar abierto. La descripción debería incluir por lo menos la versión que se puede depositar, los plazos para el depósito, y las licencias con las que pueden distribuirse las versiones depositadas.
3.7. Los repositorios de acceso abierto deberían proporcionar las herramientas, que ya están disponibles sin coste alguno, para convertir los objetos depositados en formato PDF en formatos legibles por máquina, tales como el XML.
3.8. Las instituciones dedicadas a la investigación, incluidas las instituciones que la financian, deberían apoyar el desarrollo y mantenimiento de las herramientas, directorios y recursos esenciales para el progreso y la sostenibilidad del acceso abierto.
- La lista de herramientas esenciales evolucionará con el tiempo, pero incluye repositorios y revistas de acceso abierto, software gratuito y de código abierto para repositorios, software gratuito y de código abierto para la gestión de las revistas, herramientas para la minería de datos y de texto, directorios de revistas y repositorios de acceso abierto, directorios de políticas institucionales y de organismos de financiación, proveedores de licencias abiertas, servicios de preservación digital, servicios de alerta, servicios de cross-linking, URLs persistentes y motores de búsqueda.
- Las instituciones dedicadas a la investigación deberían apoyar el establecimiento de estándares abiertos y universales para los metadatos y los sistemas de consulta que las editoriales y los repositorios podrían implementar para hacer que los resultados de la investigación en acceso abierto sean más visibles, recuperables y útiles.
3.9. Deberíamos mejorar y aplicar las herramientas necesarias para recolectar las referencias o las citas bibliográficas de la literatura publicada. La información sobre quién ha citado a quién es de dominio público y debería adoptar un formato estándar para su uso, reutilización y análisis. Esto ayudará a los investigadores e instituciones de investigación a conocer la literatura existente, aunque no tengan acceso a ella, y ayudará en el desarrollo de nuevas métricas para la medida del acceso e impacto.
- Instamos a todos los editores a colaborar con esta iniciativa.
- Recomendamos el desarrollo de la infraestructura necesaria para que los datos de referencia puedan ser depositados por las editoriales, autores, voluntarios y terceras partes empresariales, o de forma automatizada, y donde estos datos puedan alojarse para su distribución en acceso abierto.
3.10. Deberíamos ayudar con la recolección, organización y diseminación de los metadatos en acceso abierto en formatos estándar para todas las revistas tanto nuevas como antiguas, y para las revistas que no sean de acceso abierto.
3.11. Las editoriales académicas necesitan una infraestructura para el cross-linking y las URL persistentes, basada en estándares abiertos, gratuita, y que permita la vinculación y la identificación de la fuente a diferentes niveles de granularidad, como por ejemplo a nivel de párrafo o de imagen, y para la verificación de la identidad de la fuente.
3.12. Alentamos a un mayor desarrollo de estándares abiertos para la interoperabilidad y herramientas para implementar dichos estándares en revistas y repositorios de acceso abierto.
3.13. Alentamos a que se experimente con nuevos métodos para la revisión posterior a la publicación, así como el estudio de su eficacia.
- El acceso abierto a través de los repositorios, revistas o libros es compatible con cualquier tipo tradicional de evaluación por pares previa a la publicación, y el acceso abierto no presupone ninguna forma particular de revisión por pares. Recomendamos que se realicen experimentos con la evaluación pos-publicación no porque sea mejor, aunque podría serlo, sino porque reduciría los retrasos al acceso abierto del nuevo material y podría reducir el coste de la primera copia.
3.14. Alentamos a que se experimente con nuevas formas del “artículo” y del “libro” académico en los que los textos estén integrados de manera útil con los datos subyacentes, elementos multimedia, el código ejecutable, la literatura relacionada y los comentarios de los usuarios.
- Alentamos a que dichos experimentos hagan un uso mejor de los medios y redes digitales en beneficio de la investigación.
- Alentamos a que los experimentos hagan un uso mejor de las maneras en las que el acceso abierto elimina las barreras de acceso a las máquinas, y no sólo a los lectores humanos.
- Alentamos a que se usen estándares y formatos abiertos para fomentar estos usos, y la investigación sobre su eficacia.
4. Sobre promoción y coordinación
4.1. Deberíamos hacer más para que las editoriales, los editores, los revisores e investigadores sean conscientes de los estándares de conducta profesional para la publicación en acceso abierto, por ejemplo, en materia de licencias, del proceso editorial, de la solicitud de trabajos, de la declaración de la autoría, y de cómo gestionar las tasas de publicación. Los editores, árbitros e investigadores deberían valorar las oportunidades de colaboración con las editoriales y revistas en función de estas prácticas. Cuando los editores no cumplan con estos estándares el primer paso debería ser ayudarles a mejorar.
- Como medida para evaluar una editorial o revista de acceso abierto nueva o desconocida, recomendamos a los investigadores la consulta del código de conducta de la Open Access Scholarly Publishers Association (OASPA). Los miembros que deseen adherirse a la misma se evalúan de acuerdo con este código. Las posibles quejas referidas a los miembros de la OASPA así cómo cualquier sugerencia para mejorar el código de conducta deben ser remitidas a la OASPA.
- Alentamos a que todas las editoriales y revistas de acceso abierto implementen las buenas prácticas recomendadas por la OASPA o que soliciten su ingreso como miembro de la asociación, lo que implicaría una revisión de sus prácticas y la posibilidad de mejorarlas en caso necesario.
4.2. Deberíamos elaborar directrices para las universidades y los organismos de financiación que estén contemplando la posibilidad de desarrollar sus políticas de acceso abierto, y estas directrices deberían incluir los términos recomendados para su creación, las buenas prácticas y las respuestas a las preguntas más frecuentes.
4.3. Alentamos a que se desarrolle un recurso integral para facilitar el seguimiento del progreso del acceso abierto a través de las cifras y gráficos más relevantes. Cada elemento de información debería actualizarse con regularidad, y debería indicarse claramente su origen o el método utilizado para su cálculo.
4.4. La comunidad involucrada en el acceso abierto debería actuar de forma concertada con más frecuencia. Las organizaciones y activistas que apoyan el acceso abierto deberían buscar, siempre que sea posible, formas de coordinar sus actividades y facilitar la comunicación entre si con el fin de hacer un mejor uso de sus recursos, minimizar la duplicación de esfuerzos, fortalecer su discurso y demostrar cohesión.
- Deberíamos crear mejores mecanismos de comunicación y coordinación entre los miembros de nuestra comunidad.
- Deberíamos hacer un esfuerzo para contactar con nuestros colegas académicos, la prensa académica, y los medios de comunicación principales no académicos. Los medios académicos y no académicos están mejor informados acerca del acceso abierto y más interesados en el mismo que en ningún otro momento de nuestra historia. Esto supone una oportunidad para ayudar a educar a todos las partes implicadas en el acceso abierto y hacer nuevas propuestas para su avance.
4.5. La campaña mundial de acceso abierto a los artículos de investigación debería trabajar más estrechamente con las campañas mundiales para el acceso abierto para libros, tesis y disertaciones, datos de investigación, datos gubernamentales, recursos educativos y código fuente.
- Deberíamos coordinar nuestros esfuerzos con otras campañas afines aunque no estén directamente relacionadas con el acceso a la investigación, tales como la reforma de los derechos de autor, las obras huérfanas, la preservación digital, la digitalización de la literatura impresa, las políticas basadas en la evidencia, la libertad de expresión, y la evolución de las bibliotecas, las editoriales, la revisión por pares y los medios sociales de comunicación.
- Deberíamos buscar formas para amplificar nuestras reivindicaciones particulares cuando se trata de defender unos principios comunes.
4.6. Necesitamos transmitir las siguientes realidades sobre el acceso abierto con mayor claridad, con más evidencia, y a más grupos de implicados:
- El acceso abierto beneficia a la investigación y los investigadores, y la falta del acceso abierto impide la obtención de dichos beneficios.
- El acceso abierto a la investigación financiada con fondos públicos beneficia a los contribuyentes e incrementa el retorno de la inversión hecha en la investigación. Tiene beneficios económicos así como beneficios académicos y científicos.
- El acceso abierto amplifica el valor social de la investigación y las políticas de acceso abierto amplifican el valor social de los organismos de financiación y las instituciones de investigación.
- Los costes del acceso abierto pueden ser recuperados sin necesidad de añadir más dinero al sistema actual de comunicación científica.
- El acceso abierto es consistente con las leyes de derechos de autor en todo el mundo, y ofrece tanto a los autores como a los lectores más derechos que los que tienen según los acuerdos convencionales para la publicación.
- El acceso abierto es consistente con los más altos estándares de calidad.
Traducción hecha por Remedios Melero y Dominque Babini, revisada por Karen Shashok
Spanish translation by Remedios Melero and Dominque Babini, revised by Karen Shashok